Home » Noticias

Piscinas en verano: Ideales para evadir el calor

30 diciembre 2010

Las piscinas son uno de los principales centros de entretención familiar en el verano, especialmente en días calurosos cuando la concurrencia a piscinas públicas es mucho más frecuente. Si las aguas están contaminadas (por orinas y fecas, restos de protector solar, etc.), éstas pueden representar un foco de infecciones para las personas, dejando de ser un ambiente agradable y convirtiéndose en un riesgo para la salud.

Muchas de las conductas básicas de los usuarios inciden directamente en la calidad del agua y que una piscina finalmente sea segura para los usuarios. Cómo por ejemplo, el pasar por una ducha antes de ingresar a las piscinas, no comer en el agua, ni ensuciar con desperdicios, son hábitos que permitirán mantener una piscina en condiciones óptimas. Muchas personas creen que aplicando sólo cloro en las aguas, se solucionan todos los problemas en las piscinas, pero esto no es así.

La cantidad excesiva de cloro en la piscina (sobre niveles recomendados), pueden dañar la piel y los ojos, además ciertas bacterias y virus contaminantes, pueden resistir a estas elevadas concentraciones de cloro.

Se aconseja seguir las siguientes recomendaciones que son muy importantes para mantener en correcto funcionamiento las piscinas:

– Evitar eliminar mucosas dentro del agua, por ejemplo: escupir o limpiarse la nariz dentro de las piscinas, ya que estas pueden ser causa de enfermedades como: rinitis, otitis, conjuntivitis, gastroenteritis, entre otras.

– Prohibir el uso de piscinas a personas con enfermedades infecto – contagiosas, ya que pueden ser causantes de transmitir virus como el papiloma o el de la hepatitis A.

– Antes de ingresar al área de baño, las personas deben ducharse para eliminar gérmenes y partículas de suciedad (restos de cremas, arena y polvo, pelos) que se acumularían en la superficie del agua. Además el pediluvio, constituye una vía para eliminar los contaminantes de los pies.

– Extremar la higiene en zonas húmedas (como vestuarios y baños), ya que la proliferación de hongos se agudiza en éstas áreas. Las personas deben usar sandalias plásticas en éstas áreas para no acumular humedad.

– Evitar el ingreso de personas con calzado y ropa de calle, estas prendas son consideradas como contaminantes.

Factores que debe considerar para mantener la piscina en óptimas condiciones:

– Aplicar dosis de cloro entre 0,4 a 1,2 ppm en forma diaria. Se recomienda que la aplicación se realice muy temprano en la mañana o al atardecer, para evitar la inactivación del cloro por los rayos UV.

– Especialmente en piscinas con agua temperada, debe aplicar un algicida una vez por semana, para evitar la proliferación de algas en pisos y paredes de las piscinas.

– El pH de las piscinas es uno de los componentes más importantes del agua. Su valor define la acidez o alcalinidad del agua. Una piscina con pH ácido implica irritación en piel, ojos y mucosas, inestabilización de productos clorados y corrosión en las partes metálicas.  Si el pH se torna alcalino, también produce irritaciones en la piel, mucosas y ojos, se notarán incrustaciones (los filtros tenderán a bloquearse) y el agua permanecerá turbia.

¿Cómo controlar la carga microbiana en aguas? Solución Desinfección de agua

¿ Cómo controlar el pH de las aguas de piscinas? Solución Regulación de parámetros de agua